Barranco de la Virgen de la Hoz

Hola…

Una vez a la semana tengo que ir a currar a Valsalobre, cerca de Molina de Aragón. Desde que curro ahí me han llamado la atención unas formaciones coloradas que se ven a lo lejos, pero acabo de trabajar reventado y sin ganas de explorar. Ayer ya no pude aguantarme la curiosidad, y aunque estaba agotado por pagarme una palicilla de 18 kilómetros andando campo através, me dije que había que ir a explorar. Mire en el mapa, me oriente, fui para allá, y me gusto mucho lo que vi.

De Valsalobre me fui a Molina de Aragón, y de ahí a Corduente. Aquí sale una carreterilla que se interna en el Parque Natural del Alto Tajo, y cuya puerta por esta zona es el Barranco de la Hoz.

Justo al entrar al paraje hay una zona de aparcamiento donde dejo mi carro porque la necesidad de ver lo que ahí hay ya no me deja conducir en condiciones y hay peligro de que me salga de la carretera por un despiste.

El día es muy agradable, esta despejado y hace una muy buena temperatura. Aunque estoy cansadísimo los pies se me van y empiezo a caminar siguiendo la carretera apenas transitada.

El paisaje es tremendo, las formas de las rocas increíbles. En Albacete no ves estos colores en la piedra, ni estas formas, todo es distinto, ni mas bonito ni menos, distinto.

Hace millones de años esta zona era un gran río, un río como los que no hay ahora en la Península. El paso de los años, y del agua fue modelando este paisaje. El río fue arrastrando sedimentos de distinto tamaño. Los mas grandes se fueron depositando en el lecho del río, con el tienpo se fueron cementando y formando conglomerados. Mas arriba se fueron depositando granos de arena, que de igual forma con el paso de años dieron lugar a la arenisca. Conglomerados abajo, areniscas arriba, todo ordenado pero en un caos de formas hermosísimo.

El agua con el trascurrir de los milenios fue tallando las rocas esculpiendo de manera peculiar innumerables formas, me pareció ver enanitos, ogros, cabezas de león y otras cosas mas, uno aquí ve lo que quiere ver. El agua al correr por las laderas va formando canales que cada vez se hacen más profundos y que en algunas ocasiones llegan a unirse dando lugar a monolitos. Hay muchos de estos, y el más conocido es “El Huso”, junto a la carretera, llegando ya a la Hermita de la Virgen de la Hoz.

Por el camino he ido viendo Buitres Leonados (Gyps fulvus) arreglándose las plumas, oteando, copulando en las rocas coloradas por el oxido de hierro. También he visto varias veces una hembra enorme de Halcón Peregrino (Falco peregrinus). ¡La de horas que voy a pasar en este lugar!. Una pareja de Ánades Azulones (Anas platyrhynchos) navegaba como si tal cosa por las aguas embravecidas del río Gallo, un joven Cormorán Grande (Phalacrocorax carbo) salio volando, asustado por mi presencia. Algún Picogordo (Coccothraustes coccothraustes) se dejaba oír, también algún Carbonero Común (Parus major), algunos Reyezuelos Listados (Regulus ignicapilla) y Agateadores Comunes (Certhia brachydactyla). Ornitologicamente no puedo contar nada mas, estaba pendiente de las rocas, y o no había, o no supe detectar la presencia de mas aves.

Al pasar la Hermita de la Virgen de la Hoz sale un sendero que sube hacia una serie de miradores que dan un punto de vista impresionante del lugar. Solo llego al primer mirador, es tarde, estoy muy, muy cansado y hay que volver a casa. Pero aun tengo tiempo de ver otra de las curiosidades pétreas del lugar, olas petrificadas, ripples para los entendidos. Estas olas pétreas por lo visto dan muchísima información sobre el tipo de corriente de agua que las formo, de la dirección que esta llevaba, etc.

El barranco sigue aguas abajo, pero el día no me da para más, pronto volveré con mas tiempo.

Desando el camino, viendo las mismas rocas desde otro punto de vista, apreciando nuevas formas.

Nada mas que contar de momento, otro día mas.

Saludos.

Ermita de la Virgen de la Hoz

Olas petrificadas (ripples)

Conglomerado