Sarga-Padrón

Las pasadas Navidades, acompañado por mi hermano, hice una de las ascensiones mas bonitas y duras que he hecho nunca (tampoco son tantas), el macizo del Sarga-Padrón. Entonces la gran cantidad de nieve acumulada y la ventisca del día nos impidió disfrutar de la ascensión y de los paisajes, apenas me veía la punta de la nariz. Así que me quede con ganas de hacerlo con buenas condiciones climatológicas.

El fin de semana pasado mi amiga Chelo me llamo y me propuso hacer algo el domingo día 3 de Mayo), algo campestre, así que como parecía que iba a hacer bueno vi la oportunidad de ver lo que no pude ver en Navidades, y disfrutar de ellos con Chelo y su marido Juan.

El domingo después de desayunar churros con chocolate pusimos rumbo al Sarga-Padron, hora y media de coche desde Albacete. Entre Bienservida y Villaverde del Guadalimar, poco antes de llegar al puerto de El Bellotar, sale una pista a la izquierda (entre el kilometro 13 y 14). Ahí comienza la subida al Sarga-Padrón por la pista que lleva a la antena. Hay otros sitios por donde subir, pero esta es la más “fácil”.

Dejamos el coche junto al depósito de agua que hay para incendios, y comenzamos a andar. Estamos a unos 1250 metros sobre el nivel del mar, tenemos que llegar a los 1769, 500 metros en poco menos de 5 kilómetros. El comienzo no es durillo, pero poco a poco vamos notando como las botas se pegan al camino y cuesta mucho el ir haciendo metros. Las vistas increíbles, hacia el sur siempre el Cambrón, haciendo limite entre Albacete y Jaén, como un guardián, a lo lejos el Yelmo, ya en Segura de la Sierra. Delante inmensos pinares, un poco mermados porque las tremendas nevadas de este invierno han tirado muchos ejemplares. Entre el kilometro 3.5 y 4.5 hay unas rampas demoledoras. Las pulsaciones se desbocan y conviene hacer una parada con la excusa de observar el paisaje para recuperar. Es un tramo corto, afortunadamente.

Enseguida llegamos al calar que es el Sarga-Padrón, como el Calar del Mundo, pero en chico, no menos bonito. A la derecha tenemos el Sarga, enfrente el Padrón, un poco más bajo, y en medio la dolina que recoge las aguas de la lluvia y la nieve para formar un poco mas abajo el Arroyo del Tejo, un sitio bonito de verdad. Desde aquí ya queda poco para llegar por fin a los 1769 metros de altura del Sarga, conforme avanzamos vemos delante el Padrón y como quiere asomarse detrás la Almenara. Es bonito ver como conforme coges altura se ve mas grande este pico, como dándote la bienvenida.

Una vez arriba, junto al vértice geodésico, las vistas no tienen precio, es un regalo. Riopar al norte, también se ve Riopar Viejo, y entre nosotros y el Padroncillo, mas chiquitillo que el Padrón, seguramente de ahí su nombre. Al norte toda la cuerda de las Almenaras, y un poco mas a la izquierda los campos de Peñascosa y Masegoso, afeando indecentemente la vista. Al oeste todo el Campo de Montiel (Albacete y Ciudad Real), Villapalacios, Povedilla, Albaladejo, Villanueva de la Fuente, etc, se ven perfectamente. Al sur las vistas son tremendas, inmensas. Es como para quedarse ahí horas y horas contemplando las moles pétreas que como gigantes campean las sierras Béticas. El Cambrón ahora pequeñito, El Yelmo detrás, todos los picos de Cazorla, muy, muy al fondo incluso se vislumbra entre la calima Sierra Nevada, que grande. Un poco mas al Sureste La bellísima y dura Sagra en Granada, El Calar de la Sima también. Y al Este el enorme macizo cárstico del Calar del Mundo, coronado por El Argel. Abajo del todo se adivinan los conglomerados que conforman los Picarazos. Cuantas excursiones que hacer se adivinan desde aquí arriba, cuantos sitios bonitos que visitar. A ver si os animáis y compartimos jornadas como estas.

La bajada es quizás más dura que la subida, la fuerte pendiente hace que las patejas sufran, pero al menos el corazón no asoma por la garganta.

Ornitológicamente la cosa no fue muy fructifura, algunos paridos y fringílidos, un Aguililla Calzada, una pareja de Gavilanes y un Azor.

En subir y bajar, y en contemplar se nos va la mañana. Así que hay que pensar en que hacer por la tarde, y pensando pensando, barrunto llevar a Juan y Chelo a uno de los rincones mas bonitos de Albacete. Pero esto lo cuento después, ahora me voy con la bici a hacer unos kilómetros.