Buenas…
En el segundo lustro de este milenio se encontró la primera pareja de águila imperial tras varias décadas asunte como reproductora en la provincia de Albacete.
La persecución directa por parte de cazadores y ganaderos, a base de plomo y veneno, y los tendidos eléctricos llevaron al borde de la extinción a esta especia y a otras.
Hoy tenemos leyes que protegen el medio natural, y las sanciones, y la educación ambiental han hecho que las dos primeras causas bajen notablemente. Por otro lado, se han corregido no sin muchos disgustos y peleas en juzgados, infinidad de kilómetros de líneas eléctricos.
Si a esto sumamos una buen estado, relativamente, de su presa más importante, el conejo, tenemos una súbita expansión de la especie, tanto en número de individuos como en su área de distribución.
En Albacete hemos pasado en 15 años de 0 parejas a cerca de 30 parejas de águila imperial ibérica, ya tenemos incluso más que águila perdicera.
En mis habituales salidas es raro no encontrarme varios ejemplares, seguramente sea la especie que mas veo tras cernícalos vulgares y primilla, busardo ratonero y águila calzada.
En la foto un ejemplar adulto en la ZEPA del Área Esteparia de El Bonillo sobre un tendido eléctrico modificado para evitar electrocución, en según que zona, ya se ven más tendidos modificados, que sin modificar.
Si no pasa nada raro esta especie seguirá aumentando el número de ejemplares y su área de distribución.
Visto lo visto, está claro que eso de que el hábitat de esta especie era el monte mediterráneo mas puro, no es mas que el resultado de haber comenzado a estudiarla estando a punto de extinguirse, cuando solo quedaban unos pocos ejemplares en los lugares mas remotos. Por lo que veo en Albacete, el paisaje no es importante para esta especie, solo hay un condicionante, que haya conejo, ni la presencia humana es una molestia para ella.
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