Día Mundial de las Aves (1ª jornada)

Bueenaaas…

Este fin de semana, como casi todos sabéis, los que estamos metidos en el mundo del pajareo celebramos el Día Mundial de las Aves. Un día que para la SAO no es un día, si no dos. Todo un fin de semana repleto de actividades para recordarle a la gente que convivimos con unos seres emplumados que sufren serias amenazas que están haciendo que su número disminuya y que están llevando a algunas al borde de la extinción: electrocuciones, envenenamientos, caza ilegal, cambios de cultivos, etc, un sinfín de causas detrás de las cuales siempre hay una mano humana.

El sábado (3-10-2009), después de poner el cuerpo a tono con un chocolate con churros, montamos un punto de información en el Parque de Abelardo Sánchez. A todo el que se acerco se le dio información sobre nuestras actividades: censos, anillamiento científico, excursiones, etc. Se dieron folletos tanto de la SAO, como de la SEO, organización que coordinaba los actos a nivel nacional. Se atendió a la prensa que acudió ahí a interesarse por el asunto, a los políticos locales que hicieron acto de presencia (sin fotógrafos al lado)

Pero lo más interesante no fue esto, si no las distintas actividades destinadas a los más pequeños. El concurso de dibujo, los recortables de aves, pero sobre todo el taller de cometas, fueron un éxito total. Muchos críos entraron al Aula de Educación Medio Ambiental a construir sus cometas, acompañados con sus padres, que les tenían que ayudar porque no era fácil hacerlas (a mi me costo un rato largo cogerle el truco). Luego daba mucha alegría ver a los chiquillos corretear por el parque volando las cometas.

Esperemos que estas cosas sirvan para algo, que la gente se conciencie que hay que respetar a nuestras aves, que respetarlas es respetar nuestro entorno, y respetarnos a nosotros mismos.

Tras una larga mañana, agotados, hambrientos, muy sedientos, algunos compañeros nos fuimos a darle a la cerveza y a zampar. Bonita manera de acabar la primera jornada del Día Mundial de las Aves, ¡como mola ser pajarero!.